
Juan Carlos es el hombre elegido por el PJ santacruceño para representar los intereses de la Provincia de Santa Cruz en el Congreso de la Nación.
El cierre del aeropuerto de Río Gallegos por más de tres meses impacta más allá de la capital: la Cuenca Carbonífera también queda aislada.
Opinión27/05/2025Por Esteban Rebolledo
El cierre del Aeropuerto Internacional de Río Gallegos entre septiembre y diciembre no es una novedad absoluta, pero sí lo es su duración: 113 días sin vuelos, en plena temporada alta y sin un plan de contingencia sólido. Esta vez, el impacto no se limita solo a la capital provincial. La Cuenca Carbonífera —Río Turbio y 28 de Noviembre— también queda desconectada de forma directa.
Aunque existe el aeropuerto de El Calafate, para muchos viajeros, sobre todo del interior, los costos de traslado y alojamiento lo vuelven una opción poco accesible. No se trata solo del turismo o de artistas en gira. En nuestra región, médicos itinerantes que llegan desde Buenos Aires para atender patologías específicas dependen de esa vía aérea. A eso se suma el traslado de pacientes, trámites urgentes y hasta cuestiones laborales vinculadas al Estado o al sector energético.
Como ya sucedió en otras ocasiones, la pista del aeropuerto de 28 de Noviembre (El Turbio) puede habilitarse para emergencias, pero está lejos de funcionar como una solución estructural. La falta de previsión, de información clara, y de articulación con los municipios y actores locales deja a la Cuenca en una situación de espera forzada.
Desde el gobierno provincial se defendió la necesidad de la obra, señalando que hace 20 años no se realizan reparaciones integrales. Es cierto: las mejoras son necesarias, pero también lo es una planificación seria, con tiempos razonables y alternativas reales, que contemplen la realidad cotidiana de quienes viven lejos de los grandes centros urbanos.
El intendente de Río Gallegos, Pablo Grasso, expresó su malestar: “Es una decisión en contra de la gente de la capital”. Y no se equivoca. Pero también es una decisión que afecta a toda la región sur de Santa Cruz. No podemos resignarnos a ser una zona de sacrificio cada vez que se planifica desde el centro sin mirar el mapa completo.
La Cuenca Carbonífera también existe. También necesita conectividad. Y también merece ser tenida en cuenta.
Juan Carlos es el hombre elegido por el PJ santacruceño para representar los intereses de la Provincia de Santa Cruz en el Congreso de la Nación.
En tiempos donde la política parece haber perdido el alma, emerge una figura que no solo habla, sino que grita desde el corazón de la Patagonia: Juan Carlos Molina, el cura militante, el hombre de fe que se arremanga para pelear por los que no tienen voz. Hoy desde el frente Fuerza Santacruceña, no se presenta como candidato: se presenta como testimonio vivo de una Santa Cruz que no se resigna.
En medio del ruido de las redes sociales, donde las opiniones suelen basarse más en percepciones que en datos, vale la pena preguntarse: ¿Realmente la gestión municipal es ineficaz, o simplemente sus logros no son tan visibles?
Durante este fin de semana, el Gimnasio Municipal “Juan Bautista Rocha” fue escenario de una nueva edición de la Fiesta de las Colectividades y el Respeto por la Diversidad Cultural, un evento que reunió a cientos de vecinos y vecinas para compartir comidas típicas, danzas, música y tradiciones de distintos países y regiones.
Mientras el SEM en 28 de Noviembre aceptó el aumento del 17%, ATE rechazó y sigue de medidas al igual que el SOEM en Rio Turbio. Qué hay detrás de los gremios, y cómo continuará el conflicto.
En la Cuenca Carbonífera, dos modelos de hacer política se enfrentan sin mediar palabras. Mientras Juan Carlos Molina, candidato a diputado nacional por Fuerza Santacruceña, se sienta con los jubilados para escuchar sus urgencias, José Daniel Álvarez, de SER Santa Cruz, inaugura un búnker de campaña en un local cerrado, con escasa presencia vecinal, repitiendo consignas vacías sobre “fortalecer el proyecto de Vidal”.
El Intendente de Río Gallegos Pablo Grasso y el representante del Grupo Harasic, Mijael Harasic, firmaron un convenio de cooperación mediante el cual se dará acceso a capacitaciones exclusivas a jóvenes de la ciudad que se encuentren bajo el sistema de protección de derechos.
Ante el abandono edilicio por parte del Gobierno de Vidal, la comunidad educativa del Colegio 4 de Rio Turbio exige respuestas y convoca a un abrazo simbólico. Mientras se deja de lado este edificio histórico, el gobierno de Vidal prefiere priorizar en la campaña electoral de este domingo.